Aldama, Chiapas.- bajo un fuerte dispositivo de seguridad, elementos ministeriales adscritos a la fiscalía antisecuestros y con el apoyo de la fiscalía de justicia indígena y de las fuerzas de seguridad, lograron desmantelar a una peligrosa banda de secuestradores y homicidas que operaban en el municipio de Aldama, Chiapas.
Habitantes del lugar quienes con anterioridad ya habían denunciado levantones, extorsiones y homicidios, relataron que el este grupo operaba de manera impune, incluso obligaba ya al cobro de piso, por lo que acudieron a las autoridades luego del último secuestro en donde a familiares de la victima le exigían seis millones de pesos, mismos que al no poder pagar fue asesinado.
Habitantes quienes pidieron omitir su nombre por temor a represalias, relataron a este reportero, que las extorsiones, secuestros y homicidios ya eran constantes,’lo que mantenía a los habitantes en un constate toque de queda, pues después de oscurecer nadie salía de su domicilio.
Mediante trabajos de inteligencia por parte de la unidad antisecuestros y con el apoyo de la fiscalía indígena, se logró ubicar a la banda de homicidas y secuestradores, quienes estarían involucrados presuntamente en más secuestro y homicidios, entre los detenidos se encuentran Joel Galindo S.G, Andrés Martín D.G, Melchor H.R y Gilberto Ezequiel S.S. Estos últimos que se identificaron como bases zapatistas.
En el caso de Miguel N. Originario del Pinar, quien fue secuestrado hace dos meses, a sus familiares le pedían la cantidad de cinco millones de pesos, terminó pagando la cantidad de 200 mil pesos, sin embargo en el último secuestro exigian a los familiares de la Victima seis millones de pesos, que les fue imposible pagar, por lo cual los delincuentes le dieron muerte y enterraron su cuerpo.
A raíz de este último secuestro y homicidio, los trabajos de inteligencia de la FGJE en apoyo con la fiscalía indígena lograron la captura de los cuatro sujetos, quienes confesaron el lugar donde habían asesinado y enterrado a su última victima, el cual fue desenterrado y cargado por los propios asesinos por acuerdos de usos y costumbres en presencia de las autoridades para luego entregar el cuerpo a sus familiares, quienes le darán cristiana sepultura.
La desarticulación de esta peligroso banda, representa por parte de la FGJE un fuerte golpe a la delincuencia en Chiapas para restablecer el estado de derecho bajo la política de cero corrupcion y cero impunidad como lo manifiesta el Gobernador de Chiapas Óscar Eduardo Ramírez Aguilar.
Habitantes de la zona agradecieron y reconocieron la intervención del gobierno de Chiapas y de la FGJE, así como de la secretaría de seguridad pública para restablecer la seguridad en Chiapas.
Gabriel Samayoa Ruiz
El Imparcial de Chiapas
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