Una mujer de 91 años de edad, perdió la vida al tropezar y caer de las gradas de su casa. Fue una muerte inesperada para todos, porque la mujer gozaba de perfecta salud. Pero se enfermó de chikungunya y por las secuelas perdió movilidad en sus extremidades, lo que derivó en su caída fatal.
Los vecinos estaban escépticos. Los familiares no daban crédito a la noticia recibida. Es que acababan de ver a la mujer caminando por su casa.
“Yo la saludé, la vi muy repuesta de la chikungunya; no lo puedo creer”, dijo llevándose la mano a la cabeza uno de sus vecinos, mientras salía de la casa macada con el número 942, en la 18 Sur Poniente, en la colonia Calvarium de Tuxtla Gutiérrez.
Afuera de la casa, dos patrullas policíacas. Una de Fuerza Ciudadana y otra de la Policía Municipal.
Una mujer del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del Estado, estaba afuera, con uno de los familiares de la fallecida.
Adentro de la vivienda, el cuerpo menudo, delgado, de Agripina Mancilla Trejo, de 91 años de edad.
“Se mantenía en perfectas condiciones. Caminaba mucho a diario; se iba a un ranchito de acá cerca. Era una mujer que no paraba. Su vida era actividad. Solo la muerte la detuvo”, comentaron vecinos al enterarse del trágico desenlace.
Sin embargo, su salud se vio estropeada por una picadura del mosquito Aedes aegypti, transmisor de la chikungunya.
Y la mujer, que era un roble, se desvaneció. Pero aun así caminaba. Sin embargo, la factura estaba cobrada. Las articulaciones de la nonagenaria se atrofiaron. Sus extremidades perdieron fuerza y movilidad.
Y ayer temprano caminaba dentro de su casa. Y al subir las escaleras tropezó, cayó y se golpeó la cabeza. Perdió la vida así.
El hallazgo fue por parte de sus familiares que reportaron el incidente al 066, a fin de que la autoridad competente tomara conocimiento.
Fue así que los policías y personal de la PGE arribaron al lugar, para dar fe de los hechos y atestiguar el levantamiento del cadáver, mismo que fue llevado al Servicio Médico Forense, para la necropsia de rigor, ya que no fue muerte “natural”.
Vía Cuarto Poder...
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