#Comitán #Chiapas
Erik David Hernández Hernández, de 27 años de edad y de oficio Ingeniero Eléctrico, estaba a punto de contraer matrimonio con Yennifer Pérez, pero una caída en la clínica Covid-19 en Comitán, le provocó muerte cerebral.
Sus familiares lo ingresaron el pasado 13 de junio a la clínica Covid, lugar donde fue intubado por 22 días y el 06 de julio lo extubaron al presentar mejoría.
Por seis días más estuvo internado con poca ayuda de oxígeno, pero durante ese lapso un descuido de médicos y enfermeros provocó que Erik “se cayera”, pero el personal nunca presentó un estudio clínico del suceso.
Al día siguiente el jovencito fue dado de alta bajo las siguientes indicaciones: Neumonía viral, síndrome de dificultad respiratoria aguda y probable infección por SARS-COV-2.
Erik fue llevado a casa, pero los familiares se percataron que no reconocía a nadie y por la noche empezó a desaturarse y su ritmo cardiaco se complicó, llevándolo de regreso nuevamente a la clínica donde se negaban atenderlo, pero al convulsionarse y caer en un paro cardiorrespiratorio, los médicos no tuvieron otra opción.
A partir de esa fecha los familiares no tuvieron informe de seguimiento o tratamiento y optaron por contratar a un médico particular, para que ingresara a la clínica y realizara un electro-encefalograma, determinando muerte cerebral en el paciente.
Erik finalmente falleció, pero sus seres más cercanos claman por justicia y ya interpusieron una demanda ante el Ministerio Público, en contra de quienes resulten responsables.
Síguenos y escúchanos en www.imparcialchiapas.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario