“Hace 3 meses acudimos a la clínica Dr. Lizárraga en Tuxtla, porque una de mis hermanitas presentaba dolor abdominal y el médico nos dijo que se tendría que operar de emergencia porque era su vesícula; la prepara para operarla sin hacerle ningún tipo de estudio... mi hermanita sale a las 2 horas de ser operada pero el médico se distrajo con la familia de otro paciente.
Mi mamá y mi cuñado estaban a lado de ellos cuando escucharon que cayó la charola de pinzas que usan para operar y pues rápidamente entran y encontraron tirada a mi hermanita la cual me da a saber que no estaba anestesiada, ella estaba consiente.
Habló con mi mamá, hizo el esfuerzo de incorporarse a la camilla, después empezó con mucho dolor y yo bajaba repetidas veces a hablarle al médico para que la revisara, pero solo mandaba a una enfermera que le puso suero para el dolor.
Pero no fue así, ella quedó dormida y volvía, y solo le puso una bomba, la aplastaba para darle oxígeno a mi hermanita y le aplastaba el pecho varias veses cuando sabían que estaba recién operada; yo mire las 2 bolsas que le sacaron de sangre... mi hermanita murió desangrada.
El médico nos dijo que ella había tenido una trombosis; que tuvo un derrame... pero yo no le creí y pedí la necropsia de ley; cuyos resultados me acaban de entregar y dice que ella murió por desgarre de hígado provocado por proceso quirúrgico.” ¡EXIJO JUSTICIA!
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