Retienen, desarman, encarcelan y multan a elementos militares y de la gendarmeria en Chiapas.
* pagan 50 mil de multa para ser liberados.
Unos trece elementos, entre estos ocho militares y al menos cinco de la gendarmeria, fueron retenidos, desarmados y encerrados en una "carcel" en la comúnidad de Mitziton, a escasos diez minutos de la ciudad de San Cristóbal de las Casas, en Chiapas.
Los elementos del Ejército Mexicano y de la gendarmeria al mando del Capitan Felipe Cesareo Villanueva, fueron retenidos justo cuando perseguían al conductor de una unidad pointer de color gris, quien hizo caso omiso al retén instalado.
Tras no acatar dicho stop, Felipe Cesareo, capitan de la BOM, quien se encontraba a bordo de su unidad Cheyenne con placas 0813309 ordenó al Ejército y Gendarmeria ir tras el conductor.
Tras la persecución, el automóvil fue alcanzado a la altura de la comunidad de Mitziton, en donde sufrió un percanse, el conductor se refugio en dicha comunidad y solicitó ayuda a sus compañeros, Cesareo Villanueva quien fue advertido de los riesgos de ingresar, aun así dio la orden y en cuestión de minutos los pobladores rodearon las unidades militares para luego ingresarlas a su comunidad.
Conductores que pasaban por la zona advirtieron de lo sucedido a las demás corporaciones policíacas quienes mantenían el operativo en el crucero Rancho Nuevo, por lo que estas levantaron el puesto de revisión y buscaron refugio en la 31 zona militar, pero al negarles regresaron a la ciudad de San Cristóbal de las Casas.
En el interior de la comunidad los elementos de la gendarmeria y del Ejército Mexicano, fueron vejados, humillados, algunos recibieron golpes y finalmente fueron desarmados y encerrados en la carcel municipal por espacio de una hora.
Ante la multitud congregada, los elementos de la gendarmeria y del Ejército Mexicano, fueron multados por la comunidad, por lo cual las fuerzas del "orden" tuvieron que pagar la cantidad de 50 mil pesos para ser sacados de la cárcel y ser dejados libres.
A su salida los pobladores les devolvieron sus armas de uso exclusivo del ejército y la unidad en la que se transportaban, no conforme con ser encerrados por una hora en la cárcel rural, trascendio que sus superiores los arrestaron al llegar a la 31 zona militar de Rancho Nuevo, como castigo a su ineficiencia.
Con información Gabriel Samayoa
El Imparcial de Chiapas
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