El pasado 3 de noviembre se dio a conocer que Joaquín “El Chapo” Guzmán necesitaba ser sometido a un examen psicológico ante el "deterioro mental" que aparentemente sufre como consecuencia de sus condiciones de encarcelamiento.
El capo mexicano se encuentra preso en una cárcel de máxima seguridad de Nueva York. Sin embargo, se toman medidas aún más extremas con el ex líder del cártel de Sinaloa.
Una de ellas es sorprendente y la dio a conocer Eduardo Balarezo, quien es abogado y defensor de Guzmán Loera.
El Chapo no puede tener contacto con nadie en prisión. Foto: Especial
“El Chapo” fue detenido y extraditado a Estados Unidos el pasado 19 de enero, donde se le acusaban de 17 delitos como narcotráfico, lavado de dinero y uso ilegal de armas.
Desde entonces permanece preso en el Centro Correcional Metropolitano. El abogado asegura que el narcotraficante se ha quejado de sufrir alucinaciones auditivas, de sentirse perseguido y de depresión, así como de padecer numerosos problemas físicos, entre ellos continuos dolores de cabeza.
Y es que Joaquín Guzmán se encuentra en la parte más aislada de la prisión, la 10 south.
Solo cuenta con una cama, una silla, el inodoro, un lavabo y una mesa, en la celda que mide 6 por 3,5 metros. Las únicas personas que tienen contacto con él son los guardias que le llevan la comida y sus abogados.
Ni biblia ni diccionario
La semana pasada, la Justicia aceptó el pedido de su defensa para que se le realice un examen psicológico ante su "deterioro mental".
Pero Eduardo Balarezo dio a conocer algo más sobre la situación que vive el capo y su reclusión, la sorprendente noticia es que “No le han dado ni una Biblia porque podría tener algún mensaje secreto”, explicó a los periodistas, de acuerdo con Newsweek.
"Es estúpido. La biblia fue ordenada a través de Amazon. No se lo que están buscando", se quejó.
Al Chapo también le prohibieron tener un diccionario y recibir cartas de sus familiares por el mismo temor a que incluyan mensajes ocultos.
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