Su teléfono celular salió proyectado contra la cinta asfáltica, en tanto, el dueño quedó tendido entre un charco de sangre, sobre el Libramiento Norte, a la altura de la 4ª Oriente. Un vehículo lo impactó y le arrebató su último aliento.
A la 1:45 de la madrugada, el joven de complexión delgada y de tez morena, de quien se desconocen sus datos personales –vestido de short y playera de cuello redondo– caminaba de sur a norte, donde se detuvo en el camellón del carril de baja velocidad.
Con el teléfono celular en mano, el individuo, de aproximadamente 28 años de edad, se lo llevó a la oreja y comenzó a platicar con aquella persona detrás de la línea; y cuando cruzó a prisa el carril de poniente a oriente, fue impactado por un veloz automóvil, el cual el chofer optó por acelerar y fugarse con dirección al oriente de la ciudad capital.
Ahí, tendido bocarriba y en un charco de sangre, permaneció el transeúnte, mientras que su teléfono celular quedó justo a un par de metros de él. Testigos discaron de inmediato al número de emergencia y solicitaron el apoyo de un equipo médico. Minutos después, se presentaron paramédicos de la Cruz Roja Mexicana a socorrer el sujeto; pero, minutos después confirmaron su deceso.
Pronto, los elementos de la Policía Municipal arribaron para acordonar la zona y de esta manera desviar el tránsito vehicular. Una hora y media después, se presentó el personal de los Servicios Periciales para hacer las diligencias y de esta manera hacer el levantamiento del cadáver.
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