San Pedro Chenalho, Chiapas.-Ella es Rosa Pérez Pérez, abogada profesionista, con dos maestrías, una en derecho penal y otra maestría más en amparo constitucional, aunado a un doctorado en ciencias políticas y sociales; pero también es madre de familia de seis hijos, tres hombres y tres mujeres.
Ella es la mujer indígena que desafió y doblegó al poder legislativo en Chiapas, para luego reinstalarse como alcaldesa de su municipio tras ser destituida del cargo bajo presiones y amenazas por parte del Congreso del Estado y sus opositores.
A sus 37 de vida, es una mujer que sola lucho desde pequeña con las adversidades primeramente de ser mujer, segundo de ser indígena y de familia humilde; sin embargo contra toda expectativa y una siendo madre a temprana edad ella fijo sus metas y alcanzó sus sueños, entre ellos servir a su municipio de San Pedro Chenalho.
La vida no siempre te trata como quisieras, más cuando eres mujer, eres indígena y pobre señala sonriente, pero cada quien escribe las páginas de su libro acota, mientras contempla desde sus oficinas la multitud de madres de familias reunidas en la cancha previó a la celebración del diez de mayo.
La actual alcaldesa relata que curso sus estudios dede su educación preescolar, pasando por su educacion primaria en la escuela 5 de febrero, para luego ingresar a la tele secundaria, todos ellos en el poblado Yacteclum de donde es originaria.
Sin embargo tiempo después impulsada por prepararse para ayudar a su gente, salió de su comunidad y municipio para enfrentar los nuevos retos en la capital del Estado Tuxtla Gutierrez, en donde concluyó su bachillerato en el COBACH plantel uno.
Tras concluir sus estudios medio superior, ingresó a la tricentenaria Facultad del Derecho en San Cristóbal de las Casas, el alma mater, en donde concluyó su licenciatura en derecho penal, para luego obtener en su proceso de aprendizaje y preparación con una maestría en amparo constitucional y otra maestría más en ciencias penales, este última en el instituto de estudios superiores Manuel José de Rojas; para finalmente obtener el doctorado en ciencias políticas y sociales por la facultad libre de derecho en Tuxtla Gutiérrez.
Para la actual alcaldesa poder convivir con las cientos de madres de su municipio representa por mucho la satisfacción más grande y un compromiso mayor para aquellas mujeres que luchan constantemente por ser mejores.
A su paso, los pobladores en su mayoría mujeres y niñas, le muestran su cariño en señal de respeto y admiración, pues ella es una de las pocas mujeres indígenas que salió a desafiar las reglas de que la mujer indígena no tiene otra aspiración más que ser ama de casa y de criar a los hijos.
Pérez Pérez, dice que ser mujeres es un doble reto en las comunidades, sin embargo cuando hay voluntad se puede ser madre de familia y a la vez profesionista, todo depende de la persona.
Señala que ser madre es una bendición, pero ser madre a temprana edad dificulta el andar, por lo que recomienda sobre todo a las mujeres jóvenes a esperar los tiempos adecuados y prepararse para afrontar la vida, la cual seguro no es del todo fácil.
Convencida qué aún existe mucho por hacer, la alcaldesa se comprometió a velar por aquellas mujeres que son ejemplo de vida en los hogares y felicitó ampliamente a las madres de familia en su día, el cual concluyó con un festival de bailables efectuado en el parque central y la rifa de regalos.
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