Luego de que un estudiante de la Escuela Secundaria “General Emilio Rabasa Estebanell” publicó en una red social como broma de mal gusto que haría una masacre en esa institución, la Secretaría de Educación y la dirección de dicho plantel tomaron cartas en el asunto para prevenir una tragedia como la ocurrida en el Colegio Americano de Monterrey, Nuevo León, cuando un alumno disparó contra su maestra y sus compañeros, e informaron que recibirá apoyo psicológico.
La publicación realizada el pasado sábado por Jesús Eduardo “N”, estudiante de tercer grado del turno vespertino, no había tomado relevancia hasta la noche del domingo cuando otros usuarios de Facebook la reprodujeron por temor a que se tratara de un aviso real.
Una disculpa pública por parte del chico esa misma noche no logró evitar que el tema trascendiera el lunes.
Donato Arrazola Ramos, supervisor de la zona escolar 09 de las escuelas secundariasa, arribó al municipio de Villaflores para ir junto con Guillermo Fonseca Alfaro, director de la mencionada institución, en busca de los padres del joven para profundizar en el caso.
Arrazola explicó que el alumno de 15 años, quien tiene buenas calificaciones, forma parte de una familia “integrada”, pero además “modesta, respetuosa, amable y muy trabajadora”, únicamente bromeó sin imaginar las consecuencias, por lo que pidió a los padres de familia tener la confianza de que no se registrará ningún acto de violencia.
Por su parte, el profesor de dicha institución, Guillermo Fonseca Alfaro, expuso que implementarán medidas preventivas en el plantel como el “Operativo Mochila” siempre y cuando los padres de familia estén de acuerdo.
En el caso de Eduardo “N” dijo que será atendida por la trabajadora social de la escuela, quien pedirá el apoyo del DIF Villaflores para canalizarlo con un psicólogo.
El director de la Escuela Secundaria “General Emilio Rabasa Estevanell” aclaró que el lunes se suspendieron las clases no por lo sucedido con el chico sino porque los profesores realizaron una marcha en Tuxtla Gutiérrez.
Desconociendo que no había labores, ayer la Fiscalía del Ministerio Público en Villaflores decidió poner en marcha en esa secundaria el “Operativo Mochila” con apoyo del Ejército mexicano y otras corporaciones policíacas, pero cuando llegaron se llevaron la sorpresa de que el centro escolar estaba cerrado.
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