Dos indígenas oriundos de “Úrsulo Galván”, perteneciente al municipio de Palenque, Chiapas, fueron acribillados con armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas, en un camino que parte de la última caseta de vigilancia de seguridad pública municipal de esta localidad.
Se trata de los hermanos Filemón y Diego Pérez López, el primero de unos 32 años de edad, quien cayó sin vida entre los matorrales muy cerca de la carretera que dirige hacia la comunidad de “Cabecera” a tan sólo 12 kilómetros al norte de la ciudad de Tenosique.
Algo similar ocurrió con el hermano menor, Diego, de 23 años, quien a pesar de las balas, aún pudo llegar con vida al hospital comunitario en donde prepararon su viaje para la ciudad de Villahermosa a eso de las 15:00 horas del mismo miércoles.
Al herido, Diego Pérez, quien se debate entre la vida y la muerte se lo llevaron al hospital de alta especialidad en Villahermosa con un impacto de bala en la región frontal de la cabeza y traumatismo en cráneo moderado.
Mientras que el hoy extinto, Filemón Pérez, quien fue encontrado sin vida, ocupa un lugar dentro de la cámara de frío del Servicio Médico Forense (Semefo), en espera de ser reclamado.
Al momento de su muerte vestía una camisa de manga larga de color azul y amarillo, además de un estampado con figuras de gallos, pantalón azul de mezclilla, cinturón negro con una gran hebilla y botas negras tipo vaquera.
De los “matones” nadie sabe al respecto, y a pesar de que se encuentra relativamente cerca de la caseta de vigilancia de la policía municipal ubicada al norte, sobre la carretera Tenosiuque-Mactún, la policía de investigaciones aún no cuenta con datos suficientes que lleven a la captura de él o los posibles asesinos.
Esto se une a lo ocurrido en el mes de junio, cuando el trabajador de un rancho también fue masacrado con arma de fuego, mientras que el “patrón” “desapareció” en un aparente secuestro.
Vía Es! Diario Popular...
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